Momentos de mucha tensión y nerviosismo se vivieron en el microcentro tucumano con corridas, gritos y comerciantes alertados por posibles saqueos , lo que derivó en que los locales mantuvieran sus persianas cerradas durante algunas horas.
Momentos de mucha tensión y nerviosismo se vivieron en el microcentro tucumano con corridas, gritos y comerciantes alertados por posibles saqueos , lo que derivó en que los locales mantuvieran sus persianas cerradas durante algunas horas.
Ante el nerviosismo y el desconcierto, los comerciantes comenzaron a bajar las persianas. Quince minutos después de las corridas, la Policía Montada se hizo presente por peatonal Mendoza al 600. También comenzaron a escucharse sirenas en patrulleros.
El jefe de la policía tucumana, Jorge Racedo, le quitó dramatismo a la situación y aseguró: "Es psicosis de la gente; no pasa nada. No hubo actos organizados, sino unos vivos que rumorearon saqueos y robaron locales ante el caos"
De acuerdo a la agencia DyN cuatro ferias populares de venta de ropa fueron objeto de robos masivos esta tarde en distintas. Los vendedores ambulantes de juguetes y regalos que están en las peatonales se armaron con palos y objetos contundentes para repeler cualquier ataque.
Los compradores, en tanto, corrían por las calles atemorizados, con escenas de llanto y pánico que afectaron incluso las galerías comerciales más importantes de la capital. Algunas personas terminaron con golpes por empujones y caídas.
Otro de los episodios ocurrió en el barrio Independencia, un sector marginal de la capital; el tercero en La Rinconada, una populosa vecindad ladera con el municipio residencial de Yerba Buena; y el último en la llamada Terminal Vieja, a apenas siete cuadras del microcentro.
Las dos primeras ferias son itinerantes y funcionan sólo los fines de semana, mientras que en la tercera hay puestos instalados en forma permanente desde hace una década. Todas son muy visitadas por personas provenientes de sectores de escasos recursos.
Fuente: La Nación