Después de coquetear con la F-1 y de buscar un lugar en Indy Car sin éxito, Esteban Guerrieri confirmó que la próxima temporada competirá en el TC. Correrá con una Dodge e integrará el equipo Oil con Pechito López.
La noticia venía amenazando con concretarse hacía un tiempo. Parecía la bolilla lanzada por el croupier que después de dar varias vueltas alrededor del cilindro, pierde impulso y termina por caer mansa en la ruleta. El anunciado desembarco de Esteban Guerrieri en el Turismo Carretera se confirmó ayer, con un comunicado conjunto firmado por el propio piloto y por el equipo que lo cobijará en la próxima temporada, el Oil Competición.
Es un orgullo volver a correr en mi país de la mano del Oil Competición, uno de los equipos más importantes de la Argentina, y para hacerlo en el Turismo Carretera, nada menos, dijo el piloto de Mataderos agradeciendo a su sponsor, la compañía de combustibles propiedad del empresario patagónico Cristóbal López. La nafta (léase apoyo monetario) que apareció para que Esteban volviera a nuestro país fue la que no tuvo para consolidar sus pretensiones de coronar su campaña internacional en una categoría de primer nivel.
Después de una carrera promisoria en la Fórmula Renault Europea, la F-3000 Europea, la F-3 Británica y la World Series by Renault, a Guerrieri le faltó dar el salto final. Estuvo cerca del equipo Virgin (hoy Marussia) de Fórmula 1, pero no tuvo el dinero necesario para subirse al auto. Corrió en Estados Unidos, fue subcampeón de Indy Lights y hasta ganó en Indianápolis, pero tampoco pudo conseguir el respaldo para pasar a la Indy Car. La ACTC lo bancó una temporada en el exterior y la falta de mejores alternativas hizo que el piloto retribuyera ese agradecimiento con su incorporación al Turismo Carretera.
Para la categoría, la llegada de Guerrieri será un gran aliciente. Participará en un equipo fuerte en el que tendrá como compañero a José María López, que bien sabe de qué se trata eso de golpear las puertas de la Fórmula 1 sin que se las abran. Correrá con un Dodge, marca a la que la ACTC está derivando la mayoría de los debutantes para romper la dualidad Ford-Chevrolet. Como para demostrar que no quiere perder tiempo, ayer Guerrieri estuvo en Nueve de Julio, probando el auto de su nueva escudería que usó Emiliano López en TC Pista.
De todas maneras, Esteban no quiere dar todavía por terminada su experiencia en el exterior. En el mismo comunicado en que confirmó su ingreso al Turismo Carretera, apuntó que sigo trabajando en un proyecto concreto para retornar al más alto nivel internacional. Ese objetivo, a mediano plazo, es estar presente en la próxima edición de las 500 Millas de Indianápolis, que se disputarán en mayo. La meta, entonces, se reduce a una sola competencia.
Está claro que la incorporación de Guerrieri (que en los últimos años sólo había disputado un par de carreras de TC 2000 como piloto invitado) jerarquizará al automovilismo local. Pero, por otro lado, queda toda la sensación de que su campaña internacional entró inexorablemente en el pasado.