Martín Palermo ya conoció el juego de ser entrenador y sacó un punto de los últimos seis posibles para Godoy Cruz en el Inicial. Ahora, el Titán tendrá una dura tarea de pretemporada, en la que se verá obligado a reordenar las piezas sin su capitán, Nicolás Olmedo. El volante central ya acordó de palabra su llegada al Barcelona de Guayaquil, campeón del fútbol ecuatoriano, que además tendrá el privilegio de jugar la Copa Libertadores.