Una iniciativa a imitar. El Ministerio de Salud de la provincia realizó su primera experiencia en incorporar entre los proveedores del estado a productores de la economía social. Se trata de la cooperativa Ranatela, integrada por jóvenes discapacitados e internas del penal del Borbollón quienes confeccionaron ropa de cama para el Hospital de Maipú.
Más de 40 jóvenes con discapacidad intelectual y sus familias son los que forman parte de la cooperativa, a quienes se sumaron hace poco las internas del Borbollón. Desde la misma confeccionan sábanas, bolsas, tarjetas, cajas y bordados, entre otros productos.
Esta experiencia, que incorpora a los emprendedores mendocinos como proveedores del estado, brindó trabajo a más de 100 personas que participaron de la cadena de producción de la ropa de cama hospitalaria cumpliendo con todas las condiciones necesarias, intentando fortalecer la economía social a través de los productos que ellos pueden cubrir.
Por su parte, la subsecretaria de Gestión de Salud, Fanny Sarobe, señaló que meses atrás, habían recibido 9 mil juegos de sábanas a través del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, conociendo así la forma en que este sector trabaja con diferentes cooperativas y organizaciones sociales, por lo que ellos decidieron replicar esta iniciativa en la provincia.
A su vez, en la entrega de los 40 juegos de sábanas estuvieron presentes, el director de Economía Social, del Ministerio de Desarrollo Social y Derechos Humanos, Eduardo Ruiz, y la directora estratégica de la cooperativa, Lorena Coria, quien mostró orgullosa los productos terminados.