Mañana se llevará a cabo otra reunión y ésta podría ser la definitiva. Estuvieron reunidos cerca de una hora y media, tratando de llegar a un acuerdo para poder cerrar el regreso del entrenador.
La esperada segunda reunión entre Daniel Angelici y Carlos Bianchi ya se llevó a cabo y culminó. Luego de que se hayan juntado por primera vez ayer, en las oficinas del hijo del entrenador y que ambas partes califiquen, a sus allegados, la reunión como positiva, esta nueva cita sirvió para finiquitar los puntos más importantes que podrían torcer de un lado o del otro la decisión final.
Es que la de ayer se pudo tomar como una presentación formal entre ambos, pese a que últimamente se habían visto seguido, como por ejemplo pasó en la Legislatura cuando se lo premió a Sebastián Battaglia, y en la última cena de despedida a Rolando Schiavi, quien se retiró de la práctica del fútbol.
Esta vez fue diferente porque se puso sobre la mesa puntos más que importantes. ¿Cuáles fueron estos detalles a resolver? Primero el posible pedido de que la Secretaría Técnica sea disuelta. El DT no acostumbra a trabajar con intermediarios, pero esto no sería un mayor problema pensando en lo que viene.
El otro punto, más que importante a analizar, y que seguramente fue desarrollado en esta última reunión, giró en torno a lo económico. Sabido es que el DT no es uno de los considerados baratos y más si se tiene en cuenta el lapso, como mínimo, que quiere permanecer en el cargo, que serían dos años.
Sin embargo, este debate quedó claramente a un segundo plano cuando lo que se discutió es un tema que aborda lo político, lo pasional y sobre todo la imagen institucional: el regreso de Juan Román Riquelme.
Si querés ganar la Libertadores, tenés que armarle un equipo a su alrededor, habría sido el mensaje del Virrey. No hay que olvidarse que uno de los temas más desarrollados en la plataforma electoral de Daniel Angelici, fue que el hincha saque el pasaporte porque volvemos a Japón.
Claro está que para llegar primero hay que ganar la Copa Libertadores y para el DT no hay dudas que será prescindible la presencia del último ídolo, quien había anunciado que no volverá a vestir la camiseta de Boca. Sin embargo, por estar el mismísimo Bianchi enfrente, el mejor técnico que lo dirigió, según palabras del propio Román, todo podría pasar.
Lo cierto es que Carlos Bianchi ya aclaró que quiere dirigir y si no es acá habría manifestado que hay avances en el exterior. Su entorno más íntimo habla de que el Virrey tendría ofertas importantes para trabajar en Brasil y esto lo entusiasmaría, además que la familia lo acompañará en la decisión que él tome.
¿Dónde se desarrolló dicho cónclave? Bianchi siguió 'jugando de local y fue nuevamente en las oficinas de su hijo Mauro. La misma duró cerca de una hora y media, y si bien no hubo definiciones sobre el retorno del Virrey, ambas partes avanzaron en las negociaciones y acordaron volver a juntarse mañana por tercera vez.