Así lo confirmó la bella artista en una entrevista con el diario The Guardian -y que reproduce TeleShow-. "No quiero que a mi hijo le genere un trauma en el colegio cuando sus amigos le enseñen mis sesiones de fotos en bikini", explicó.
Fox confesó que ser madre le cambió la vida y que a partir de ahora será "mucho más exigente" a la hora de aceptar determinados papeles, sobre todo si tiene que mostrar su cuerpo.
La actriz expresó también que desde que nació su bebé, hace poco más de dos meses, es "una mujer nueva". "Estoy enamorada de mi hijo y solo quiero estar en casa con él".
Sin embargo Megan contó que durante las primeras semanas tanto ella como su marido, el actor Brian Austin Green, tuvieron algunas dificultades para cuidar al bebé y que, por tal motivo, decidieron buscar ayuda.
"Hemos contratado una enfermera dos noches por semana porque si no íbamos a terminar divorciándonos", explicó en la nota que reproduce El mundo.
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Finalmente Fox, que logró recuperar rápidamente su figura tras dar a luz a Noah, aseguró que no se vuelve loca por ir al gimnasio. "Solo quiero estar en casa con mi bebé", concluyó.