Si algo abundó en la nueva edición del derbi entre Real Madrid y Atlético Madrid fue el juego brusco. En total, se registraron 42 faltas, intercambio de escupitajos entre algunos protagonistas, y otras cuestiones alejadas del reglamento. En ese contexto, no extrañó que ese clima caliente traspasara el rectángulo de juego y también involucrara a los bancos de suplentes.
Con el partido 1 a 0 para los merengues, los dos cuerpos técnicos jugaba "su" partido en cada reclamo al cuarto árbitro. En un momento, casi sin moverse de su asiento, José Mourinho le marcaba con la mano que había dos asistentes del Aleti dando indicaciones. Fue demasiado para Germán Burgos, ayudante de campo de Simeone...
"¡Yo no soy Tito. Yo te arranco la cabeza", le gritó el Mono, con su vozarrón, al DT de Real, en relación al piquete de ojos que éste le había aplicado hace 14 meses al entonces asistente de Guardiola y hoy entrenador de Barcelona.
Al respecto, hoy Mourinho ignoró a Burgos. "¿Quién es ese?", respondió en conferencia de prensa al ser consultado por ese incidente.
El entrenador portugués aplicó la misma estrategia que cuando tuvo aquel altercado con el ayudante de Guardiola, cuando ante los micrófonos dijo: "¿Pito Vilanova? No sé quién es ese Pito".