"Este tipo de cosas es para los locos. Nos dicen locos porque hacemos cosas distintas pero yo digo que soy un loco cuerdo porque siempre pienso en ir al límite y el límite es vamos más grande, vamos mejor".
Y sí... Guillermo Marín, presidente de la compañía Imagen Deportiva, un día se animó a soñar con que Roger Federer jugara en la Argentina y lo logró: el mejor tenista de todos los tiempos disputará en el Tigre dos partidos de exhibición ante Juan Martín del Potro, el 12 y 13 de diciembre en un evento esperado por todos.
Para eso, el propio Marín es quien encabeza el proyecto de armado del estadio a cargo de Adriana Campos y Diógenes de Urquiza (dos ex tenistas argentinos), emplazado en el Tigre, una de las localidades más lindas del norte de la provincia de Buenos Aires sobre el cual trabajan día y noche para terminar de concretar uno de los recintos más importantes del país.
Con espacio para 20.600 personas y una vista privilegiada desde todas las gradas,supera en capacidad al mismísimo Parque Roca (14.500 personas), estadio que alberga la Copa Davis y duplica al que el propio Marín preparó en abril de 2011 para recibir a Andre Agassi y a Pete Sampras.
No se podia menos para recibir al suizo y al argentino, quien también se ganó su sitio entre los mejores del mundo en los últimos años.
Federer se describe como "un tipo normal" y así lo confirma el empresario: "Es una persona que no parece quien es: muy sencilla y a su vez muy carismático, simpático. No pidió nada más que un asado y conocer la cancha de Boca, es increíble", remarcó.
Marín adelantó que más que dos partidos de tenis, el evento será un show:"Cacho Castaña va a cantar el Himno Nacional, habrá un baile de tango protagonizado por Valeria Archimó e Iñaqui Urlezaga, habrá un show aéreo y no quiero adelantar más porque quiero que la gente se sorprenda. Este será un show para todos", anunció.
Fuente: Infobae.