De esta forma, los morosos perderán el beneficio de las cuotas pero además, deberán hacerse cargo del costo que tiene el apremio.
De esta forma, los morosos perderán el beneficio de las cuotas pero además, deberán hacerse cargo del costo que tiene el apremio.
También tendrán que responder con una notificación el comunicado de baja al plan de pago que le hará el Estado. Si la persona que adeuda no realiza este paso, Rentas podrá judicializar el caso.
Según lo informado desde la Dirección General de Rentas, por el impuesto inmobiliario son 13.870 los contribuyentes que perdieron el plan de pago. Eso representa un monto total de 18.304.236, 38 pesos.
Por su parte, por el impuesto del automotor, son 30.066 las personas que no han cumplido con lo acordado, dejando así una deuda de 25.210.540,90 pesos.
En tanto que por Ingresos Brutos son 13.518 los que continúan en calidad de morosos, con una deuda que alcanza los 68 millones de pesos.