La variedad de colores que ofrece el maquillaje es enorme, sin embargo no todos los tonos lucen bien en nuestras facciones. Para lograr un equilibrio agradable y seductor hay que tener en cuenta los tonos del cabello y la piel. Bien usado, el maquillaje es un aliado clave para vernos mejor. No tengas miedo a las sombras y rubores, todo es cuestión de práctica. Para realizar un buen make up necesitás algunos pinceles, una buena brocha y habilidad en tus manos para colocarlo con suavidad. Recordá que el secreto está en las capas de maquillaje, esto evitará que te excedas en la aplicación de color.
-Castaño. Si tu pelo es castaño, tu piel mediana y querés lograr el look más saludable del invierno, optá por la propuesta de Michael Kors: rubor rosado fuerte marcando pómulos, labial rojo gastado (para dar con el efecto, colócalo con la punta de tus dedos, en vez del pincel) y sombreado en tono mate/nude. No olvides colocar previamente un corrector en tono cálido, no lo elijas muy blanco porque no da buen aspecto. En tu pelo hace un rodete en forma de torzada y dejá algunas mechas sueltas.
-Rubio. Para las rubias, naturales o no, es buena idea generar contraste. Por la fuerza del delineado el maquillaje de Lanvin es ideal para la noche, apto para todos los tonos de piel, de los más claros a los más oscuros. Es necesario tener la piel en buenas condiciones o usar una muy buena base, para emparejar el tono de tus facciones. Elegí un buen delineador líquido y practicá las líneas hasta lograr pulso. Si no te sale parejo recordá que podés arreglar el trazo con un isopo. Para que el color quede fijado en el parpado, aplicá con un pincel un poco de sombra gris oscura o negra y colocá máscara de pestañas en la parte superior. Dejá la boca en tono nude, solo resaltala con un poco de manteca de cacao o brillo labial. Lo mejor es llevar el pelo suelto apenas ondeado y con raya al costado.