Primeras consultas desde Chile

Con menos agencias, el sector turístico de Mendoza se alista para la reapertura de fronteras

Por Miguel Ángel Flores

Aunque todo cambió drásticamente en relación a la temporada 2019-20 prepandemia, muchos se preparan para reactivar el negocio en otras condiciones. Otros tomaron otro rumbo y no volverán. Lo cierto es que la decisión oficial de reabrir fronteras para turistas de países limítrofes como Brasil y Chile desde el 1 de octubre despierta lógica expectativa en el sector turístico de Mendoza, esperanzado en recuperar el tiempo perdido y recomponerse del duro golpe que le dio el Covid-19.

A falta de 3 días del primer vuelo a Chile previsto por Aerolíneas Argentinas (cada sábado a partir del 25 de setiembre) y con otra ruta a la vista que quiere explotar Latam (ex LAN) desde octubre, el sector calienta motores para volver a captar visitantes de los países vecinos con distintos paquetes. De hecho, para debatir el nuevo panorama, los operadores se reunieron el miércoles en Tucumán

Desde allí, Sergio Sánchez, de AMAVYT (Asociación Mendocina de Agencias de Viajes y Turismo), mostró una perspectiva medida respecto al futuro próximo del turismo receptivo.

El directivo admitió que "hay consultas" desde el mercado trasandino, todo supeditado a los vuelos que autorice la ANAC. 

"Los chilenos tienen que venir si o si en avión, y por ahora la conectividad aérea es un vuelo de Aerolíneas semana. Esto mejora las expectativas, pero la demanda es una rueda que tarda en moverse", consideró Sánchez.

Vuelos y expectativa

Aunque con algún escepticismo por el avance de la pandemia, en ese contexto, el sábado 25 despegará rumbo a Santiago de Chile el primer vuelo de Aerolíneas Argentinas desde que el tráfico aéreo se interrumpió por la pandemia.

Proveniente de Aeroparque, el Embraer de la compañía partirá desde Mendoza con pasaje completo como vuelo internacional a la capital trasandina a las 15,30, y retornará el mismo día, con 100 pasajeros desde Santiago. A esa frecuencia semanal busca sumarse Latam con otra después del 18 de octubre que ahora espera la factibilidad definitiva, mientras la propia ministra de Turismo provincial, Mariana Juri, le pidió a la Nación que habilite también a Sky Airlines.

"Desde el 1 de octubre se abren las fronteras, y habrá que ver cómo las aerolíneas y los aeropuertos nos adaptamos a esto que resultó un tanto inesperado. Esperamos la documentación respecto al ingreso de chilenos y brasileros, incluso con respecto a los cupos", señaló al respecto Sergio Rinaldo, gerente regional de Aeropuertos Argentina 2000.

Con la prioridad puesta en el potencial flujo desde y hacia países limítrofes, por ahora el pedido de Copa Airlines para la ruta Mendoza-Panamá quedará "en la cola" en un mercado ya de por sí más reducido si se observa el movimiento de cabotaje. 

Es que más allá de su estado, hay un parque de aeronaves recortado desde el inicio de la pandemia: además de la salida de Norwegian, que operaba con 3 para Mendoza, Andes se quedó con 8 unidades menos, Flybondi pasó de 7 a 3. Por ahora la flota más numerosa es la de Aerolíneas Argentinas: cuenta con 8 Embraer y algunos Boeing.

Un rubro más chico

 El sector tuvo que adaptarse a las restricciones al turismo, con mayoría de agencias en modo home-office y algunas que se vieron forzadas a bajar persianas. Actualmente 160 permanecen activas.

No son pocos quienes optaron por "dar el volantazo" ante la crisis, como Javier Agrelo, ex titular de la entidad empresaria, que cerró su agencia a mediados del 2020. Pero un caso paradigmático es el de Alejandro Pulido, que durante 16 años se dedicó al turismo receptivo con su agencia Cubas de Roble y hoy se dedica al turismo corporativo con una flota de 10 autos para firmas como Holcim y Arcor.

Según Pulido, "el cambio de rumbo se decidió con la pandemia, incluso tuvimos que vender un par de autos para pagar indemnizaciones a los empleados". No obstante, considera que "es fantástico para el turismo que se reabran las fronteras, porque mucha gente perdió todo, y otros terminaron vendiendo todo y pidiendo ayuda".

Tal vez por eso no descarta del todo un regreso a futuro, de la mano de un complejo de cabañas que construye en las cercanías del Manzano Histórico, en Tunuyán. "Veremos cómo evoluciona todo. Quizá en un par de años volvamos", anticipó.

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