La víctima fatal tenía 34 años

Un hombre muerto y un policía herido tras un tiroteo en San Rafael

Por Hernán Adrover

Un hombre de 34 años terminó muerto luego de un tiroteo que se produjo con policías este martes por la madrugada en el departamento de San Rafael. La víctima habría querido entrar a la casa de su pareja teniendo prohibición de acercamiento y cuando llegaron los efectivos el presunto malviviente comenzó a disparar e hirió a un uniformado, quien tuvo que ser operado. Luego el agresor fue abatido. 

Según la información, todo se inició cerca de las 21 de este lunes cuando un llamado al 911 alertó sobre una denuncia de violencia de género. En ese llamado, una mujer pidió ayuda porque su ex pareja la había agredido. 

Los policías se desplazaron a calle Suipacha  pero al llegar, el supuesto agresor ya no estaba. Horas después, ya a las 5 de este martes, otro llamado denunció la misma situación y otra vez los efectivos se desplazaron a ese domicilio. 

Hasta esa calle llegó el móvil 3306 de la Comisaría Octava para verificar la denuncia. Los efectivos entraron en el rodado y por un pasillo, donde observaron a un hombre mientras quería entrar a la casa de su pareja. 

En ese momento los policías quisieron identificarlo a distancia y cuando comenzaron a acercarse el sospechoso sacó un arma de fuego y comenzó a disparar, explicaron. En ese momento hirió a uno de los efectivos, de 40 años, quien recibió dos impactos: uno en un hombre y otro en la zona lumbar. 

El agresor se acercó al herido y le sacó el arma reglamentaria, indicaron. "Le apuntó en la cabeza para matarlo y ahí el otro policía le disparó", detallaron. El supuesto malviviente fue identificado como Roberto Armando Cruz, conocido con el alias de "Sapo", y murió a los pocos minutos producto de dos impactos de bala.

En tanto, el efectivo herido fue trasladado hasta el Hospital Schestakow donde fue intervenido quirúrgicamente. En tanto, las autoridades judiciales esperan por las pericias de Policía Científica, las declaraciones de los testigos y de los policías para poder esclarecer el hecho de sangre. 

El otro efectivo que participó en el operativo no resultó con lesiones y, por directivas, se secuestraron las armas reglamentarias de los uniformados y del hombre abatido. 

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