Homebanking, tarjetas y billetera virtual

Nuevo hábito: en 1 año de pandemia se duplicó el uso de dinero "electrónico" y los montos

Por Miguel Ángel Flores

Nos acostumbramos a manejar cada vez menos dinero en efectivo? Poco a poco y tal vez por efecto del mix pandemia y seguridad, aparentemente sí. La afirmación se apoya en cifras del sistema financiero: en comparación con el año pasado, hacemos el doble de transacciones electrónicas y por importes mayores, un crecimiento que se percibe incluso en relación con el mes anterior.

De acuerdo a los últimos indicadores del BCRA en su informe sobre bancos, los valores se mantienen por encima del promedio mensual de 2020. De hecho, se observan incrementos en todos los canales de transferencias, aunque con mayor dinámica en las realizadas por banca electrónica de empresas; sólo en marzo, tanto las de acreditación inmediata como a 24 hs aumentaron 96,5% en cantidades y 50,1% en montos reales interanuales.

"Fomentamos la digitalización y la inclusión financiera porque claramente hay una conversión del uso del dinero físico a los medios de pago electrónicos. Es un instrumento que creció enormemente, más del 70% en general y particularmente homebanking un 29%, aunque dentro del cual, para la misma cantidad de clientes mayormente se inclinan al uso del canal mobile", reseña Hernán Portillo, gerente de Medios de Pago del Banco Nación, consultado por Sitio Andino.

De hecho, respecto de marzo del 2020, el uso de la banca móvil prácticamente explotó. Se hicieron casi 3 veces más operaciones por montos hasta 145% mayores, y medido en términos del PBI (todo lo que genera la economía), su incidencia no es menor: las transferencias totales que registró el sistema representan 44%, casi 15 puntos más que en 2020.   

Una operación en cajero, según la suma, puede implicar volver a casa con un fajo de billetes de $100 y el riesgo que implica. ¿Influyen las condiciones del dinero circulante? Para Diego Ruggeri, gerente zonal Mendoza del Galicia, "la baja denominación de los billetes que el Central no absorbe y la comodidad y seguridad de operar desde casa o la oficina sin dudas impacta en el canal físico. El volumen de operaciones por canales electrónicos se incrementa día a día y mes a mes".

De las tarjetas a la billetera virtual

De marzo a marzo, también crecieron las operaciones con tarjetas de débito, otro indicador de la vocación por prescindir de a poco de billetes en mano. El uso aumentó un 23,7% de acuerdo a la estadística del Central, mientras que los montos están 30,2% arriba del año pasado.

El comportamiento fue complejizándose desde que la pandemia nos cambió la manera de vivir. Eso tal vez justifique el crecimiento de pagos no presenciales con la tarjeta de débito (comercio electrónico) sobre el total de pagos, al mismo tiempo que las extracciones de efectivo vía cajeros automáticos disminuyeron respecto al mes anterior, tanto en montos reales como en cantidades.

Indudablemente, la pandemia activó un "click" en la mente del usuario para siempre y confirma esos índices. "Siento cierto asco de tocar los billetes, por eso pago todo lo que puedo con Mercado Pago u otra plataforma a través del celular, incluso en el kiosco. Al cajero voy una vez al mes para extraer lo que necesito", reseña Andrés (40) después de hacer una compra.

Sin embargo, quienes aún no se habitúan a las apps siguen aferrándose al débito. De acuerdo al último registro, la cantidad de transacciones por parte de clientes del Nación en Mendoza de un mes al otro crecieron 10%, una variación mucho más notable si se mira el comportamiento a marzo del 2020: la compra promedio repuntó 42% interanual y el ticket ya ronda los $2.000, casi 100% arriba.

 Portillo no duda al afirmar que "es un indicador claro de que el producto creció", y lo ejemplifica con la experiencia de la comunidad BNA+. "El 65% de los clientes mendocinos que la utilizan también emplean tarjeta; entre quienes no lo son el ratio cae al 45%.

La velocidad de la migración de lo físico a lo virtual y electrónico fue el caldo de cultivo ideal para un fenómeno que irrumpió para cambiar el panorama de la digitalización. Con Modo, muchos bancos hacen camino al andar en cuanto al uso de la billetera virtual con su propia versión dentro de un mercado incipiente (en Mendoza ya hay 4 habilitadas de la mano del programa Mendoza Activa).

Un 17% de los casi 200 mil clientes del Galicia en Mendoza ya bajaron la app y la utilizan como medio de pago. Por eso, el balance preliminar (la billetera se lanzó a principios de año) que hace Ruggeri es prometedor. El ejecutivo asegura que la entidad atraviesa una fase de "educación" de los usuarios potenciales "con una difusión de sus ventajas de uso tanto entre clientes como entre comercios que pueden adherir".  


Te Puede Interesar