Ya son cuatro las derrotas consecutivas y a nivel resultados el presente claramente no es bueno. Aun así, mirando el vaso medio lleno, Lanús tiene material como para creer en su equipo de reserva. Por la fecha 11, fue derrota por 2 a 1 ante Vélez, un club que siempre destaca por sus talentos en la divisional.
A nivel personal, Emiliano Gómez sigue afianzado. Después de confirmarse su presencia en la lista de buena fe de la Copa Sudamericana, el alvearense tiene motivos para seguir sonriendo a pesar de las caídas de su equipo. En esta oportunidad vistió la casaca 8, jugando como volante. Una posición que no es la natural pero que ya conoce de las formativas y en la cual ha demostrado sentirse cómodo, abriendo más el abanico de posibilidades para llegar a primera.
Gómez fue reemplazado en el complemento por Martín Ginzo. Otro dato positivo: el delantero Varaldo, que anotó el único gol del Granate ante el Fortín, sumó su tanto número 9 en 11 partidos. En la próxima jornada se viene un rival de esos que generan una gran exposición para mostrarse, como así también un enorme envión anímico en caso de resultado positivo: Boca Juniors.