arriesga una pena a 20 años de cárcel

Abusos en la UNCuyo: seguirá detenido el profesor Mauro Aguirre

Por pedido de la propia magistrada, Aguirre continuará alojado en una celda del CETRAJU -ex Contraventores- hasta que los peritos finalicen con una serie de pericias psicológicas. Luego de esto, podría ir a la cárcel.

Leceek rechazó el control jurisdiccional -una especia de revisión de causa- que habría presentado el abogado defensor, Enoc Ortiz, donde requirió la liberación del sospechoso o bien el inicio del régimen de prisión domiciliaria.

La jueza valoró las pruebas que presentó la fiscalía y querella, ratificando la acusación por "abuso sexual simple, abuso sexual con acceso carnal y tentativa de abuso sexual con acceso carnal", todo eso, en 7 denuncias que presentaron al menos dos víctimas. De esta forma, el imputado arriesga una pena de hasta 20 años de cárcel.

En tanto que los otros tres imputados Leandro Fontán, Lucía Fernández y Mario Codoni, seguirán libres bajo fianza, pero imputados como partícipes primarios en los mismos delitos.

Viviana Beigel, abogada querellante, aseguró que el relato de las víctimas es contundente y destacó que ese testimonio es idéntico en ambas damnificadas, a pesar de que las mujeres no se conocen.

A partir de ahora, la causa ingresará en un proceso de pericias psicológicas, las cuales definirán en gran parte el futuro de la investigación.

Es que las víctimas denuncian, puntualmente, las secuelas psíquicas que le provocaron los hechos denunciados. Por lo tanto, especialistas podrán analizar a las mujeres y el informe será clave. En tanto que algo similar ocurrirá con los estudios a los imputados.

Aguirre fue detenido el viernes 10 tras una denuncia de abuso sexual que radicaron al menos dos mujeres.

Las víctimas, de 18 y 19 años y miembros de una agrupación de la Facultad de Ciencias Políticas de la UNCuyo, aseguraron que el hombre las abusó ejerciendo contra ellas "discriminación, amenazas y violencia de género".

Concretamente, las denunciantes aseguran que en el marco de supuestas actividades de la agrupación, eran llevadas por algunas personas -los tres imputados de partícipes primarios- a una "cena de gala", pero que en el transcurso de ese encuentro quedaban solas con el profesor, quien las obligaba a tener relaciones sexuales.

En sus relatos, afirmaron que los partícipes necesarios las incitaban a tener relaciones con el profesor y que Aguirre tenía actitudes de "Jefe" de una secta. 

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