El costo del tsunami chileno de 2010 asciende a U$S30.000 millones
Representa 17% del PBI del país trasandino. Así lo afirmó Sebastián Piñera, a 3 días del segundo aniversario del desastre natural, en el que murieron más de 700 personas.
El presidente de Chile, Sebastián Piñera, dijo hoy que el costo de los daños causados hace casi dos años por el terremoto y el posterior tsunami que sufrió su país asciende de U$S 30.000 millones, lo que supone un 17% del producto bruto interno (PBI).
El mandatario formuló estas declaraciones durante una reunión del comité interministerial de reconstrucción en la base naval de Talcahuano, tras el cual entregó una cuenta pública sobre los avances del gobierno en este proceso.
El lunes se cumplirán dos años de la segunda peor catástrofe natural ocurrida en Chile y una de las 10 más enérgicas en la historia mundial.
A las 3.30 de la madrugada del 27 de febrero de 2010 un terremoto con epicentro en la costa, frente a la localidad de Cobquecura (a 150 kilómetros al noroeste de Concepción), sacudió al país trasandino. Como consecuencia de ello, un fuerte tsunami impactó en las costas y provocó la destrucción de ciudades, que ya habían sido devastadas por el sismo previo. Murieron más de 700 personas.
Entonces, el alerta de tsunami se amplió a 53 países ubicados a lo largo del océano Pacífico, tales como Perú, Ecuador, Colombia, Panamá, Costa Rica, la Antártida, Nueva Zelanda, la Polinesia y Hawai.
En Chile a este desastre natural sólo lo superó el terremoto de Valdivia, de 1960, el de mayor intensidad registrado por el hombre mediante sismómetros: fue 31 veces más fuerte y liberó cerca de 178 veces más energía que el devastador terremoto de Haití, ocurrido en enero de 2010.
Piñera hizo hoy un detallado recuento de todas las pérdidas humanas y materiales que significó la tragedia, enfatizando que ese fue el cuadro que debió enfrentar su gobierno el 11 de marzo cuando le tocó asumir la responsabilidad de dirigir el país, que el día del terremoto era gobernado aún por la socialista Michelle Bachelet.
Recordó que su administración se puso la meta de reconstruir en cuatro años el 100% de lo que el terremoto y el maremoto destruyeron y que aún queda un tercio de la labor de reconstrucción. Sin embargo, destacó que el país ya ha hecho un esfuerzo gigantesco.
En materia de vivienda se encuentran en etapa de construcción 136.000 de las 220.000 casas destruidas y han logrado entregar en forma definitiva a las familias 72.000 de esas construcciones.
El mandatario centroderechista, no obstante, dijo que la magnitud de la tragedia no obstaculizó el crecimiento económico y el avance en políticas sociales del gobierno durante la primera mitad de su mandato.
"De la tragedia se desprenden varias lecciones, siendo la fundamental que tenemos la obligación de estar preparados. Chile necesita de un sistema de alerta temprana y protección civil adecuados", planteó. Y destacó que ese está construyendo una red para enfrentar futuras catástrofes naturales.
Al respecto, Piñera aseveró que no sólo basta con decretar la alerta, sino que también las autoridades de gobierno deben estar preparadas para ayudar a las víctimas, para evitar el saqueo y el pillaje, como los ocurridos tras el terremoto, en Concepción.