Otro cachetazo para Independiente: Quilmes le ganó 7 a 1
En una noche para olvidar, la Lepra fue humillada por el Cervecero que con esta victoria es líder transitorio del ascenso. El Azul, entró en promoción. Los jugadores se fueron sin hablar.
Uno de los partidos más esperados de la jornada 22 de la Primera B Nacional se desarrollaba en el estadio Centenario José Luis Meiszner, donde Quilmes buscaba subirse otra vez a lo más alto del campeonato y superar al menos por un rato a River e Instituto en la tabla de posiciones. Pero la tarea parecía no ser sencilla porque Independiente Rivadavia se presentaba en el Sur con muchas urgencias y la necesidad de sumar para no caer en Promoción. Sin embargo, el desarrollo del partido se dio como indicaba la lógica, pero con un histórico resultado porque el Cervecero vapuleó a la Lepra por 7 a 1.
El conjunto local salió a la cancha decidido a mostrar quién sería el dominador del partido y en el primer ataque que tuvo, a los seis minutos dio el primer golpe cuando Martín Cauteruccio picó la pelota por encima de César Taborda y abrió el marcador. Pero los de Ricardo Caruso Lombardi no se conformaron con eso tan sólo nueve minutos más tarde estiró la ventaja cuando Jorge Serrano empujó una pelota proveniente del tiro de esquina y marcó el 2-0. Y Quilmes siguió buscando hasta que dio un nuevo cachetazo a los 34 minutos: tiro libre a favor que Miguel Caneo clavó junto al palo derecho del arquero mendocino. De esta manera se iba el primer tiempo con un contundente 3-0 a favor del local.
Y el complemento no tendría ninguna sorpresa, ya que sería más de lo mismo. Aunque la visita intentaba descontar, el Cervecero supo manejar el partido con una tranquilidad inusual y decisiva, para que luego le permitiera seguir sumando porotos. Once minutos tuvieron que transcurrir para que apareciera nuevamente Caneo, luego de una habilitación de Fernando Telechea y marcara así el 4-0. Pero los dirigidos por Gustavo Zapata ya habían avisado que querían llevarse algo y tuvieron el descuento por medio de Cristian Fabbiani, que de pecho bajó el balón para clavarlo en el ángulo de Emanuel Trípodi.
Pero había tiempo para más. Luego de que la visita se quedara con diez hombres y tras un error de Alberto Gómez, Sebastián Romero se quedó con la pelota y convirtió un gran gol, que nada pudo hacer Taborda para impedirlo. Y habría más porque Franco Quiroga detuvo una pelota con la mano dentro del área: expulsión y penal a favor del local, que Caneo cambió por gol. El resultado ya era contundente, pero sobre la agonía del encuentro, a los 44 minutos, Romero sacó un fuerte disparo al arco que se desvió en Maximiliano Oliva para así decretar el 7-1 final.
Mientras el Centenario desbordaba de alegría por la goleada y por haber alcanzado la cima del torneo, en la visita se agudizó la crisis: la Lepra se metió en zona de Promoción, el técnico Gustavo Zapata quedó en la cuerda floja y en el vestuario hubo incidentes entre dos compañeros: Marcos Britez Ojeda y Pablo De Miranda.
