"El impasse es porque hay un grupo absolutamente minoritario, según la información de los coroneles y oficiales, que la verdad está más preocupado" por extender el movimiento de protesta a varios estados, señaló el gobernante al canal de televisión Globo. "Cualquier oferta es insuficiente porque lo que ellos quieren es justificar ese movimiento", agregó.
Wagner indicó que el Gobierno ofrece un alza gradual de salarios pero que no puede aceptar el indulto a los doce líderes huelguistas, cuyo arresto es solicitado por la Justicia. Uno de ellos fue capturado el domingo.
Los uniformados en paro responsabilizaron al gobernador por la falta de acuerdo tras siete días de huelga, que desataron una ola de unos 115 asesinatos, saqueos y robos que sumió en el caos a Bahía mientras se prepara para recibir a miles de turistas para el Carnaval en unos días.
"Se cerró la negociación y no hubo acuerdo. La huelga continúa, la policía continúa paralizada", dijo el soldado Alexandre Leite, dirigiéndose, a través de un altavoz, a los manifestantes que acampan afuera del edificio legislativo para apoyar a los huelguistas.
Desde adentro de la sede legislativa cercada por los militares, el soldado Armando de Quirino dijo a la AFP por teléfono que los huelguistas están preparados para enfrentar un eventual asalto militar tras el fracaso del diálogo.
"El gobernador mandó a tomar posiciones a los escuadrones de élite para invadir, quiere una carnicería. Si eso quiere, aquí estamos preparados", afirmó.
Fuente: Infobae
En las redes sociales, los rumores sobre la cancelación del Carnaval a causa de la violencia desatada en San Salvador de Bahía por una huelga policial crecen con rapidez. Los enfrentamientos entre el Ejército nacional y los oficiales, sumados al alza de
delitos y los saqueos debido a la falta de seguridad en la ciudad, provocaron que las reservas turísticas cayeran de manera significativa, a menos de 20 días del comienzo de los festejos, según difundió el diario brasileño A Tarde.