Estiman pérdidas por u$s600 millones por el naufragio del crucero italiano
A las mermas que provocará que el barco esté fuera de servicio se suman otros costos que la empresa aún no pudo medir, como el pago de seguros y los menores beneficios durante la temporada.
A pocos días del naufragio del barco Costa Concordia, que ocurrió el pasado viernes frente a la isla italiana del Giglio, la compañía estadounidense Carnival Corporation, dueña de Costa Cruceros, ya estima un impacto de entre u$s85 millones y u$s95 millones en sus beneficios para 2012.
Se trata sólo de las pérdidas que enfrentará porque el barco estará fuera de servicio en lo que resta de su actual ejercicio fiscal, que termina el 30 de noviembre, según detalló Carnival en un comunicado. A esto, además, se sumarán otros costos que la empresa aún no pudo cuantificar.
La compañía, con sede en Miami, explicó ayer que cuenta con un seguro de cobertura de daños de hasta u$s30 millones y otro de responsabilidad civil para daños personales de otros u$s10 millones.
Las firmas aseguradoras de Carnival van a hacer frente a unos costos de más de u$s510 millones por el naufragio, según distintos expertos consultados por Bloomberg. Esta cantidad equivale a un cuarto de los beneficios de la empresa en 2011, que obtuvo u$s1900 millones de ganancia neta total.
Hannover Re, la cuarta aseguradora mundial, será la que haga frente a las mayores pérdidas. Assicurazione Generali, RSA Insurance y el grupo XL también aseguraban al barco hundido, si bien las pérdidas se van a extender a todo el sector asegurador.
El trágico naufragio, que provocó al menos 6 muertos y 15 desaparecidos, también puede afectar al sector de los cruceros, que deberá recuperar la confianza de los clientes, asustados por las espectaculares imágenes del barco, que volcó sobre uno de sus lados.
Este accidente podría tener un impacto relevante en términos de las operaciones porque estamos en la temporada alta para las reservas, dijo Geoffrey dHalluin, analista de Natixis, a la agencia Reuters. Para otro analista, Wyn Ellis, de Numis, el impacto será breve. La gente tiene memorias de muy corto plazo. Este verano va a ser terrible pero en términos de las valoraciones de largo plazo el impacto será marginal, dijo.
Por su parte, el secretario general de la Organización Mundial del Turismo (OMT), Taleb Rifai, aseguró que el accidente no tendrá un impacto significativo en la demanda de cruceros mundial. Según Rifai, el sector turístico ya sufrió accidentes, desastres o atentados que afectaron la demanda a muy corto plazo pero posteriormente se produjo siempre una rápida recuperación.
Con respecto al mercado local, fuentes consultadas por el diario El Cronista minimizaron un posible rechazo de los turistas a los viajes en crucero. Además, explicaron que para la Argentina la temporada alta de cruceros abarca de diciembre a marzo y que el 95% de los viajes se venden entre octubre y mitad de diciembre, por lo que la mayor parte de los turistas ya adquirió sus pasajes.
El naufragio también puso en evidencia la vulnerabilidad de estos barcos gigantes y de una industria que venía creciendo a pesar de la crisis. Según la cadena BBC, en 2011 cerca de 20 millones de personas contrataron un crucero, un 14% más que el año anterior.
Se estima que hay cerca de 280 compañías que ofrecen unos 30.000 cruceros a más de 2000 destinos. Desde hace 20 años es uno de los sectores con más crecimiento económico cercano al 8% anual, detalla la OMT.
El Costa Concordia fue considerado el más grande de Europa cuando se inauguró, en el año 2006: pesa 114.00 toneladas y tiene una capacidad de 3.700 pasajeros, un auténtico hotel sobre el mar. Se calcula que costó unos u$s460 millones.