En la noche del martes sorprendió la renuncia de Hernán Lewin como presidente de Temperley. Si bien ya había aclarado la semana pasada que el clima entre la dirigencia y la barrabrava del Gasolero estaba cladeado y avisó que "Si tengo problemas con la barra, me voy", su confirmación vía Facebook asombró, sobre todo al tener que asumir que, una vez más, los violentos ganaron la pulseada.
"Este es un mensaje de despedida para todos los hinchas del Cele. Lo estuve pensando varios días y hablando con gente que me quiere y he tomado la decisión de dar un paso al costado en mi cargo de Presidente del Club", arrancó Lewin en su comunicado oficial en redes sociales. En algunos párrafos donde manifestó su cariño por la institución, el ex presidente expresó gratitud y contó los motivos por los que no seguirá enfrentando la violencia de la barra.