En "un día negro", como lo definió a través de RADIO ANDINA San Rafael, Carlos Simón, periodista sanrafaelino y corresponsal del Diario Los Andes en el Departamento, el Buenos Aires Herald publicó su última edición diaria en papel el que supo ser el único diario escrito en inglés en Latinoamérica. El matutino, reconocido por sus emblemáticas editoriales en épocas de dictaduras y por la calidad de su información, sostuvo 140 años de historia en las calles porteñas, pasará a ser un semanario.
Carlos Simón
A propósito de la noticia y además de comentar algunos de los aspectos más notables de este diario, Simón también comentó su perspectiva sobre el gremio periodístico en la actualidad.
En cuanto a las numerosas alternatias que hoy se ofrecen para la formación de profesionales periodísticos, Simón dijo que "a mi juicio las carreras de periodismo son fábricas de desocupados, los chicos son atraídos muchas veces con falsas expectativas, tanto laborales, como posibilidades de desarrollarse en otros ambientes, dibujando de distintas formas una carrera que es, para el ámbito privado un negocio y para el público un desperdicio de esfuerzo, creo que el 99.9% de los graduados, no tendrá posibilidades laborales", comentó.
"Hay una ola de desocupación en el ambiente periodístico que supera las dos mil personas, el cierre del diario de papel es hoy algo cotidiano", dijo Simón, "varios diarios de circulación en papel están tomando otros caminos, donde además de tener su edición online, se inclinan por el desarrollo de la información en el papel, que le permite al lector profundizar lo que leyó en internet", agregó.
En cuanto al diario en el cual él se desempeña, Simón no precisó hasta cuándo el centenario matutino mendocino, que acaba de cumplir 133 años, mantendrá su edició diaria de papel.
Desde su punto de vista, uno de los aspectos que más ha desmejorado la calidad del desempeño profesional en la actualidad es la poca predisposición de los periodistas para esmerarse en la capacitación personal. "Cuando un periodista pierde la capacidad de asombro se tiene que dedicar a otra cosa", sentenció, explicando que desde su punto de vista el mayor capital del periodista está en la capacitación personal y en la mejora permanente, porque se puede tener una buena base, pero si no hay esmero en hacer lo propio cada vez mejor se cae en la mediocridad con mucha facilidad.
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