El gobernador Alfredo Cornejo padece de diverticulitis, el diagnóstico fue dado por el equipo médico del Hospital Español luego de someter al mandatario, este domingo, a estudios debido a dolores abdominales.
El gobernador Alfredo Cornejo padece de diverticulitis, el diagnóstico fue dado por el equipo médico del Hospital Español luego de someter al mandatario, este domingo, a estudios debido a dolores abdominales.
Tras pasar por una ecografía y una tomografía del abdomen, los médicos diagnosticaron que Cornejo sufre de diverticulitis.
Los divertículos son pequeños, abultados sacos o bolsas que se forman en la pared interna del intestino. La diverticulitis ocurre cuando estas bolsas se vuelven inflamados o infectados. Si los sacos no se han infectado, la enfermedad se llama diverticulosis: aprendamos más sobre ella.
¿Qué es la diverticulitis?
La diverticulosis es una condición en la cual se forman pequeños sacos o bolsas en la pared o la membrana que reviste cualquier porción del tracto digestivo. Estos sacos se forman cuando la capa interna del tracto digestivo ejerce presión hacia fuera sobre puntos débiles de la capa externa. Un saco individual se conoce con el nombre de divertículo. La diverticulitis es cuando se infecta o inflama uno o varios divertículos y tiene otras consecuencias.
Consecuencias de la diverticulitis
La diverticulosis puede ocasionar complicaciones inflamación, infección, sangrado o bloqueo intestinal. Afortunadamente la diverticulosis no provoca cáncer.
La diverticulitis ocurre cuando los sacos se infectan o se inflaman. Esta condición por lo general produce dolor abdominal localizado, sensibilidad al tacto y fiebre. Una persona con diverticulitis puede también sentir náuseas, vómito, escalofríos o estreñimiento. Su médico le puede ordenar una TC para confirmar el diagnóstico de diverticulitis.
Los casos más leves de infección usualmente se tratan con antibióticos orales y no requieren hospitalización. Si no se trata, la diverticulitis puede ocasionar una acumulación de pus (llamada absceso) fuera de la pared del colon o una infección generalizada en la membrana que recubre la cavidad abdominal, lo cual se conoce con el nombre de peritonitis. Usualmente, se requiere una tomografía computada para diagnosticar un absceso, y el tratamiento por lo general requiere hospitalización y la administración de antibióticos por vía intravenosa. Los ataques reiterados de diverticulitis pueden requerir cirugía para remover la porción de colon afectada.
El sangrado dentro del colon puede originarse en un divertículo y a esto se le conoce con el nombre de sangrado diverticular. Esta es la causa más común de sangrado profuso por el recto en los pacientes mayores de 40 años, y por lo general, se hace aparente por la eliminación de sangre de color rojo o marrón por el recto.
Ocasionalmente, pueden ser necesarios la cirugía y otros procedimientos para detener el sangrado que no puede interrumpirse por medio de otros métodos. El bloqueo intestinal puede ocurrir en el colon por causa de ataques reiterados de diverticulitis. En este caso, puede requerirse cirugía para remover el área de colon que está involucrada.
¿Quién puede sufrir diverticulosis?
La diverticulosis es común en las personas mayores de 60 años y en casi todas las personas mayores de 80. A medida que una persona envejece, los sacos del tracto digestivo se hacen más promimentes. La diverticulosis es poco común en personas menores de 40 años. Además, es poco común en ciertas partes del mundo tales como Asia y África.
¿Cuáles son los síntomas de la diverticulosis?
La mayoría de las personas que tienen diverticulosis no tienen idea de que padecen esta condición puesto que ésta por lo general no presenta síntomas. Es posible que algunas personas con diverticulosis tengan hinchazón abdominal, cólicos abdominales o estreñimiento debido a la dificultad que tiene la materia fecal para atravesar el área de colon afectada.
¿Cómo se hace el diagnóstico de diverticulosis?
Puesto que la mayoría de las personas no presentan síntomas, la diverticulosis con frecuencia se descubre accidentalmente durante un examen para evaluar otra condición o durante un examen para evaluar la presencia de pólipos. Los gastroenterólogos pueden ver directamente los divertículos (más de un saco) en el colon durante un procedimiento que utiliza una pequeña cámara adherida a un tubo iluminado y flexible que se introduce a través del recto. Uno de estos procedimientos es la sigmoidoscopia en la cual se usa un tubo corto para examinar solamente el recto y la parte baja del colon. En la colonoscopia se utiliza un tubo más largo para examinar todo el colon. La diverticulosis también puede verse mediante otras pruebas de imágenes; por ejemplo, en la tomografía computarizada (TC) o en las radiografías que usan bario.
¿Cuál es el tratamiento para la diverticulosis?
Una vez que los divertículos se forman éstos no desaparecen por cuenta propia. Afortunadamente, la mayoría de los pacientes con diverticulosis no presentan síntomas, y por lo tanto, no requieren tratamiento. Cuando la diverticulosis también produce dolor abdominal, hinchazón estomacal o estreñimiento, su médico le puede recomendar una dieta con un contenido alto en fibra, para hacer que las evacuaciones intestinales tengan una consistencia más suave, y por consiguiente, que puedan evacuarse con mayor facilidad. A pesar de que es recomendable consumir entre 20 y 35 gramos de fibra al día, la mayoría de las personas consumen más o menos la mitad de eso.
Fuente: MedlinePlus.-