Una oficina del Partido Republicano en la ciudad de Hillsborough, Carolina del Norte, fue atacada con una bomba incendiaria la madrugada del domingo y en las paredes de un edificio adyacente pintaron una esvástica y letreros con una amenaza a los republicanos, dijeron autoridades locales.
"La sustancia inflamable parece haber encendido el interior del edificio, quemado algunos muebles y dañado el interior del local antes de apagarse. La sustancia estaba en una botella que fue lanzada a través de una de las ventanas delanteras del edificio", según un comunicado de la ciudad de Hillsborough.
El Comité Republicano en Carolina del Norte dijo en una declaración escrita que el ataque causó graves daños, pero que no hubo víctimas.
La candidata demócrata a la presidencia de Estados Unidos, Hillary Clinton, condenó el ataque, que calificó de horrible e inaceptable.
Sin embargo, y también en Twitter, el candidato republicano a la presidencia, Donald Trump, señaló a seguidores de Clinton por el ataque.
"Este acto altamente perturbador va mucho más allá que el destrozo a una propiedad, es deliberadamente una amenaza a la seguridad de nuestra comunidad, con el incendio y un mensaje de odio, que socava la decencia, el respeto y la integridad en la participación ciudadana", sostuvo el alcalde de Hillsborough, Tom Stevens.
"Creo que hablo por la inmensa mayoría de las personas que hacen de Hillsborough su hogar: Hechos como este no tienen lugar en nuestra comunidad", agregó el alcalde.
Carolina del Norte es un estado clave en la elección presidencial que disputan Hillary Clinton y el republicano Donald Trump. El gobernador del estado, Pat McCrony, dijo en Twitter que el ataque al local republicano fue un ataque a la democracia. Fuente: CNN.-
