Andrés Di Cesare fue detenido el martes en Maipú y este miércoles al mediodía quedó imputado por estar sospechado de ser el autor material del crimen de Julieta González (21), la chica maipucina que fue hallada asesinada a golpes el martes 27 de setiembre en Luján. El sospechoso, si bien se negó a declarar, tras su captura confesó ser el autor y dijo el motivo que lo habría llevado a asesinarla.
El único imputado en la causa explicó que se había cansado de que la chica le pidiera plata con el fin de afrontar los costos de un embarazo que nunca existió. La chica, según el testimonio de Di Cesare, le mentía y le decía que había quedado embarazada producto de las relaciones que habían mantenido.
En continuidad de ese testimonio, el acusado, quien es hijo de un empresario ligado al transporte, explicó que la joven lo extorsionaba para que le diera dinero pero este último se negó en un par de oportunidades. De todos modos, en esto tuvo contradicciones porque también aseguró que le entregó alguna suma en su momento.
La versión de que la joven estaba embarazada surgió días después del crimen y por esa razón una de las primeras medidas que se realizó fue saber si González estaba esperando un hijo, situación que se descartó luego de los análisis que le practicaron al cadáver.
Este hostigamiento habría provocado que Di Cesare se cansaray por esa razón tomó la decisión de matar a la joven que ya tenía un hijo, cuya custodia pertenece al papá del pequeño.
El cuerpo de Julieta fue hallado la mañana del martes 27 de setiembre en Cacheuta, cerca de las ripieras de la vieja ruta 7. La cabeza de la joven presentaba varios golpes y luego se confirmó que esas heridas le ocasionaron la muerte.
A partir de ese momento trabajaron sobre el testimonio de las personas que vivían cerca de donde la hallaron y sobre unas cámaras de seguridad que hay en la zona de la destilería. Fue en estas últimas imágenes donde encontraron algunas pistas para identificar al autor que luego fue identificado.
Finalmente, este martes cayó Andrés Di Cesare mientras salía de la empresa familiar ubicada en calle Alsina.