El fútbol suele acercar este tipo de historias y demuestra que mueve montañas. Así al menos sucedió con Iván Rodríguez (foto), un tucumano que arribó a General Alvear para trabajar en la cosecha y se terminó topando con el Sport Club Argentino, club para el cual defiende los colores en la quinta división.
"Me vine a cosechar y me llamó la atención esto de jugar. Un amigo me trajo acá, me recibieron muy bien y acá estoy", arrancó su relato el pibe, que desde este campeonato está en las filas de la Academia.
La nueva vida le gustó tanto que decidió quedarse, pero había varias cosas para tener en cuenta. "Me ayudaron a conseguir un trabajo y yo pedí quedarme, llamé a mi mamá y ella me dejó. Cuando termine el torneo quiero ir a verla porque tengo toda mi familia allá", señaló Rodríguez.
Con el certamen en plena disputa y su nueva actividad en proceso, el tucumano no se alejó de quienes estuvieron con él desde un principio en estas tierras. "Vivo en la calle Alberdi con la misma gente que cuando me vine a cosechar. Estoy muy bien y cómodo", cerró.