en fm 90.1

Un apasionado de la vida en Radio Andina

Gustavo Arce es una de las voces conocidas de la radio mendocina, sobre todo para los amantes del fútbol de ascenso. Descubrí la historia del hombre de las mil estadísticas.

Tranquilamente el bar donde nos encontramos podría haber sido la sede de alguna charla de Roberto Arlt con los compadritos del 30. Allí merendamos con Gustavo Arce, el hombre que desde hace unos días es el encargado de llevar adelante la central informativa en las transmisiones de FM 90.1 Radio Andina con el equipo de Dos de Punta.

Gustavo es ciego, pero se da cuenta de cosas que varios que gozan del sentido de la vista pasan por alto. Descubrió que en la mesa de al lado un peregrino dormía con medio cuerpo sobre la mesa y media botella de cerveza, aún por beber. Sabía que más atrás otro roncaba con la espalda en la pared. Eran las 14.30.

Una atrofia papilar bilaterar de nacimiento le impide ver. "Mis viejos se dieron cuenta porque ellos jugaban con mis hermanos con un muñequito y mis hermanos lo recibían, estiraban las manos, y yo no". Se ríe, contagia su risa y redescubro que su "falta", no le pesa.

De chico abrazó la profesión de la radio y allí comenzó a encontrar su lugar en el mundo: "Cuando terminé la escuela de ciegos en la Helen Keller la cooperadora nos regaló un grabador de periodista, era un Phillips con casette que era una barbaridad y yo estaba como loco, grababa a todos", cuenta emocionado mientras decora las frases con fechas y acontecimientos deportivos, como hace los domingos en la radio.

Tenía 17 años y Hugo Torrente ya se reía fuerte en Radio Cóndor y otras FM de la provincia. Hasta él llegó Arce para hacerse un lugar en los medios: "Aproveché que en el año 95 habían puesto un poco de pie a la Asociación de Ciegos y fui a hablar con Torrente para ofrecerle hacer la cobertura de eso y fui notero. Allí me metí".

La charla tomó un lindo ritmo y yo quería aprovechar a preguntarle: 

-¿Cómo llegaste a las trasmisiones deportiva?

-Un día escuche una trasmisión en Radio Maipú y no había central informativa entonces lo llamé y le dije a Mario Araujo (relator) que quería hacerla yo y empecé en abril del 97 en un partido entre Gutiérrez y Murialdo. Ese día fue un quilombo, vos también estabas (entre risas).

-¿Central informativa, es lo que más te gusta hacer?

-Me gusta hacer central, me emociona dar todos los resultados, pero me gusta mucho la producción, armar las previas organizar los viajes, entre otras cosas. La gente me registra por la central informativa pero para mi gestionar y producir las trasmisiones es apasionante.

-¿Cómo hacías para armar la central cuando empezaste, donde no había computadora ni celulares?

-Mis viejos me leían el diario y yo escuchaba TN Deportivo. Me grabada diciendo los resultados y después me escuchaba hasta aprendérmelo de memoria y me iba a la radio. Ahora es distinto, tenes programas para ciegos que te leen los resultados. Antes no había ni celulares.

-¿Cómo descubriste la forma de hacer Central Informativa?

-En el 93 jugaban Gimnasia y la Lepra en el Parque y yo estaba escuchando Radio Infinita pero sabia que LV 10 mandaba a cubrir Talleres contra Santa Unión en la B de la Liga y escuche a Palmer en Infinita decir: “Goool de Santa Unión” y ahí dije, estás escuchando a los otros y aprendí como se hacía central.

Gustavo Arce es de la escuela del trabajo, de tarde mágicas en un estudio de radio, es el hombre orquesta y él sabe que en el fondo tengo razón. Alguna tarde por problemas técnicos tuvo que relatar: “Un día estábamos trasmitiendo por internet y se cortó la señal, entonces me puse los auriculares y empecé a repetir lo que escuchaba de los relatores de Buenos Aires. 'Toma la pelota por la punta derecha, se prepara para el centro y había que relatar amigo'", suelta entre risas mientras baja de un gran trago su jugo de manzana helado.

Yo recargo los dos vasos y le pregunto si alguna vez comentó. "No sabes", tira y casi vende la anécdota: "Una vez me mandaron a Rivadavia para acompañar a un amigo que quería relatar, la idea era que yo hiciera central informativa desde la cancha pero no le avisaron al locutor comercial y en el entretiempo el vago presentó el comentario de Gustavo Arce. Y qué le iba a decir al aire, soy ciego, no puedo, tuve que comentar nomás. Y los plateistas me gritaban 'dejá de mentir, Rivadavia".

Lo veo moverse con gran naturalidad y le pregunto si le gustaría ver: "Sí, me gustaría porque yo no sé como es ver", contestó y agregó: "Alguna vez sentí que estuve cerca de ver". No dudé en pedirle que me contara y él accedió. "En el año 95 vino el doctor Milton, que era un curandero de Brasil que vos le mandabas una foto y el te daba unos brebajes naturales y después te operaba, pero bueno, no hace falta que te diga que no funcionó. Esa fue la vez que estuve más cerca de lo sería ver".

Gustavo parece tener sentido del humor permanente, incluso en estos temas que suelen ser incómodos. "Estaría bueno que algún día la tecnología llegue a eso pero prefiero que lo prueben primero en otro. Mirá si me tocan el cerebro y por querer cambiar una discapacidad me compro otra".

La charla se estira y una nueva trasmisión nos hace marca personal y nos apura. Le quiero preguntar de sus referentes, de su presente y de sus sueño. “Uno de mis grandes maestros fue el viejo Gómez, ex dueño de Radio Maipú, porque él me ayudó a encontrar mi lugar en todo esto y me puso en Vendimia, recién el año pasado lo entendí. Alfredo Marques también fue un puntal en mi carrera pero en realidad aprendes de todos, también de los que salen muy mal al aire aprendes como no se hacen las cosas".

-¿Qué significa llegar a Radio Andina para vos?

-Llegar a Radio Andina para mí es un gran aprendizaje. Una radio donde sólo tengo que hacer radio. Acá están todas las comodidades dadas, tenés tool back para hablar con el operador y una técnica zarpada. Además puedo abrazar con lo que hago a muchas personas que saben lo que hago pero nunca pude demostrarlo como lo hago. Además, a mí me llaman justo el día que fallece Alfredo Márquez y yo sentía profunda admiración por el tipo al que yo considero que le robaba el conocimiento y como creo mucho en esas cosas, dije capaz que el Gordo quiere que esté acá.

-¿Qué te gustaría hacer que aún no has hecho?

-Me gustaría tener una radio propia, eso es lo que no hecho y me gustaría hacer, pero para lograrlo primero tendría que ganarme la Lotería o Quiniela.

Nuestros vecinos de mesa no detienen su siesta, casi son las 17 y me acuerdo de mis inicios en la radio, allí estaba él iniciando también. Pienso en varios colegas y su origen periodístico se relaciona con Gustavo Arce, no es casualidad. Él busca eso, porque ve cosas que muchos no entienden ni llevándoselas por delante. "Para muchos lo máximo es trabajar con los consagrados, para mí lo más grande es estar al lado del que recién comienza", dice mientras me saluda y pagamos los jugos de manzana.


LO QUE SE LEE AHORA
El Tomba y el Fortín vuelven a verse las caras en el Amalfitani

Las Más Leídas

El empresario Gustavo Gómez y dos de sus hijos murieron en un accidente vial. 
Trágico accidente en San Martín: tres personas perdieron la vida tras el vuelco de una camioneta
Quini 6: resultados y ganadores del sorteo 3244 del domingo 16 de febrero.
Festival Nacional de la Cueca y el Damasco: una noche a pura música y alegría de la mano de La Sole y Ke Personajes. 
Grave incendio en la fábrica de vidrio Cattorini en Maipú. 

Te Puede Interesar