Apareció la bomba deseada. Impactó el golpe buscado por más de dos años para desplomar al rionegrino Nelson Fabián Pilotti en el tercer asalto, en un combate desarrollado en la provincia de San Juan.
Apareció la bomba deseada. Impactó el golpe buscado por más de dos años para desplomar al rionegrino Nelson Fabián Pilotti en el tercer asalto, en un combate desarrollado en la provincia de San Juan.
Es que el mendocino Gumersindo Lucas Carrasco (21-2-0; 15 nocauts) volvió a exhibir sus dotes y ganó por la vía del cloroformo ante un rival complicado como el patagónico Pilotti (14-9-1; 7 nocauts).
El ahora pupilo de Jorge Arias noqueó con un durísimo cross de derecha al sureño en una pelea que dominó sin problemas y que fue montada en la vecina provincia por el verborrájico Mario Arano, promotor que le ha asegurado al boxeador de La Favorita combatir cada 45 días, palabra que por ahora el empresario viene cumpliendo con total rigurosidad.
Estoy muy contento porque hice una gran pelea y además estoy peleando cada 45 días. Pienso que se va a dar alguna chance importante. Estoy en un gran momento y espero afianzarme para ser el campeón de la gente, comentó Gumer.
Estamos entrenando bien con Jorge Arias, me siento cómodo y eso para mí es muy importante, señaló el boxeador que no ganaba por la vía del nocaut desde octubre del 2012, cuando en el Polideportivo Juan Domingo Ribosqui de Maipú desplomó al experimentado rosarino Daniel Dorrego.