Opinión

Carmona defendió a los camporistas que renunciaron al gobierno

Afirmó que fue “una buena decisión” el haberse ido por no haberse avanzado en la disposición del D2 para un espacio de la memoria.

El precandidato a gobernador Guillermo Carmona defendió a los 5 ex funcionarios militantes de La Cámpora que renunciaron al gobierno de Francisco Pérez, al denunciar que no se profundizó en materia de derechos humanos, bandera de la agrupación de jóvenes.

Los funcionarios que decidieron dar un paso al costado fueron Juan Manuel González, como subsecretario de Derechos Humanos; Natalia Brite y Emilio Báez, dos directores del área de Derechos Humanos; Pablo Ferrari, director del Hospital Lencinas; y Gabriela Bazán, directora de la Escuela de Gobierno de Mendoza.

En la bodega Los Toneles, el Diputado Nacional opinó que hubo una justificación de estas renuncias “al no avanzarse en la disposición del edificio del Palacio Policial en un espacio de la memoria”, donde funcionó en la época militar un centro clandestino de detención y tortura.

Sin embargo, pese a acompañar la decisión de sus compañeros de alejarse del Gobierno, indicó que seguirán con el compromiso de aportar al ejecutivo provincial “siempre y cuando estén dadas las condiciones y en aquellas áreas donde se puedan cumplir los objetivos de gestión”.

En tanto, también aclaró que los militantes y candidatos de sus listas “no están atornillados a sus cargos”, por lo que analizó positivamente que den un paso al costado cuando no se puedan realizar los objetivos que uno tiene en mente y “dejar al Gobernador que disponga lo que crea conveniente”.


¿Creés que las renuncia de los funcionarios estuvieron justificadas?

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