Un nuevo estudio publicado por la revista Nature plantea que en 1610 comenzó un nuevo período geológico que marca la edad del hombre llamado Antropoceno. Científicos creen que la llegada de los europeos al continente americano tuvo un impacto sin precedentes en el planeta y, por lo tanto, este momento puede considerarse como el inicio de una nueva época.
Por otra parte, otros consideran que la revolución industrial o las primeras pruebas nucleares deberían marcar el comienzo del Antropoceno. Y hay quienes creen que la fecha exacta de una nueva época solo puede determinarse miles o millones de años más tarde.
Los geólogos dividen la historia de la Tierra en segmentos que reflejan tiempos de cambios significativos que pueden ser el resultado de movimientos continentales, el impacto de un gran asteroide o un cambio profundo en el clima.
En la actualidad, estamos, formalmente, en una época llamada Holoceno que comenzó hace más de 11.500 años tras el final de la última Edad de Hielo. Pero ahora, científicos sostienen que la humanidad ha alterado el planeta de forma dramática.
A fin de establecer el comienzo de esta nueva fase los geólogos están buscando una clara señal que describen como un "marcador", que debe estar grabada en rocas, sedimentos o en hielo.
"Buscamos estos marcadores, un momento real en el tiempo en el que puedas mostrar en un registro cuándo cambió toda la Tierra", señala Mark Maslin, profesor del University College de Londres y coautor del estudio. Y agregó: "Si tomas en cuenta la maravillosa escala temporal geológica entera, hemos definido casi todos los límites de esa manera".
El estudio apunta a que uno de estos marcadores ubica el inicio del Antropoceno en 1610. De acuerdo a los investigadores, la llegada de los europeos a América cien años antes dio inicio a una transformación global de gran envergadura.
"El comercio global después de ese momento provocó un traslado de especies", señala Simon Lewis, coautor de la investigación del University College de Londres. "Maíz de América Central comenzó a cultivarse en el sur de Europa, África y China. Papas de Sudamérica se cultivaron en Reino Unido, Europa y China" continuó.
"Las especies también viajaron en la dirección contraria. El trigo llegó a América del Norte y la caña de azúcar a América del Sur... una verdadera mezcla de especies en todo el mundo. Vimos a estas especies saltar continentes, lo cual implica un impacto geológico sin precedentes que envió a la Tierra en una nueva trayectoria evolucionaria" explicó el científico.
El investigador sostiene que otro marcador está vinculado a las enfermedades mortales que llegaron a América desde Europa. "Cerca de 50 millones de personas murieron (en las Américas) y la mayoría de esta gente eran campesinos. Y en estos campos volvió a crecer la vegetación original: bosques tropicales, secos o sabanas. manifiesta Lewis.
Y sigue su análisis: Alrededor de la mitad del peso seco de un árbol es carbono, por tanto toda la vegetación que estaba creciendo absorbió suficiente carbono de la atmósfera para que se produjera una caída pronunciada en la concentración global de dióxido de carbono y esto puede verse en los registros de los núcleos de hielo. Esto nos marca exactamente el inicio del Antropoceno en 1610, cuando se registra el punto más bajo de CO2 en los registros de núcleos de hielo de dicha época".
Por otra parte otros investigadores establecen que otro inicio posible podría ser 1964, cuando una prohibición puso punto final a las pruebas nucleares de los años 40, 50 y principios de los 60. El aumento del carbono radioactivo en la atmósfera mientras se llevaron a cabo las pruebas fue seguido de una caída drástica tras su finalización. Esto ofrece otro marcador que podría tomarse como un punto de inflexión.