A escasos centímetros del público que veía la novena final del año de Turismo Carretera en el autódromo "Oscar Cabalén" de Alta Gracia terminó tras un despiste el Ford del entrerriano Mariano Werner, quien afortunadamente, al igual que los espectadores, no sufrió consecuencias físicas graves.
Con 19 vueltas cumplidas, el paranaense no pudo frenar a tiempo su unidad, que se disparó hacia la tierra arada, golpeó contra las gomas de contención, superó un pequeño talud y quedó prácticamente apoyado sobre el alambrado perimetral del circuito.
Suceció a falta de 6 vueltas para terminar. El Ford se quedó sin frenos antes de la entrada de una curva a la derecha. Werner no pudo controlar el auto, que siguió derecho, atravesó la tierra arada, pegó contra las gomas de protección y sólo se detuvo cuando pegó contra el tejido.
Del otro lado, el público escapó como pudo. Sólo hubo un herido: Rodolfo Escalante, de 43 años, quien sufrió un golpe en la espalda cuando uno de los postes que sostenían el tejido dio en su cuerpo. Según los organizadores de la carrera, está fuera de peligro.
Werner salió por sus propios medios del vehículo, asistido por el cuerpo médico de la categoría. El piloto fue aplaudido por un público que estuvo a poco de ser embestido por el Ford número 2. "Por suerte no hay heridos en el público, yo estoy bien. La salida fue muy veloz y hasta que lo pude frenar llegamos hasta ahí", dijo Werner.
El Turismo Carretera hizo su regreso a este trazado cordobés luego de más de 26 años de ausencia.