San Lorenzo de Almagro dio esta noche un paso muy importante en el camino que lo conduce a su primera Copa Libertadores de América al golear como local al Bolivar por 5-0, en el encuentro de ida de una de las semifinales del certamen.
San Lorenzo de Almagro dio esta noche un paso muy importante en el camino que lo conduce a su primera Copa Libertadores de América al golear como local al Bolivar por 5-0, en el encuentro de ida de una de las semifinales del certamen.
Mauro Matos, Emmanuel Mas, en dos oporrtunidades, Juan Mercier y Julio Buffarini le dieron una victoria soñada al equipo de Edgardo Bauza. Con dos pelotas paradas, el equipo azulgrana liquidó el pleito en los 45 minutos iniciales. Frente a un equipo boliviano que cortó con faltas el buen circuito futbolístico liderado por Leandro Romagnoli e Ignacio Piatti, el Ciclón sacó una importante ventaja capitalizando sendos tiros libres.
Y sobre los 27 fue Mas, imparable por momentos por su lateral, quien burló la endeble defensa boliviana y también de cabeza le puso su sello a otro centro del Pipi, esa vez ejecutado desde la derecha.
En los diez minutos posteriores se vio lo mejor del local en la etapa. A Piatti le salían todas y, sobre los 34, tras asociarse con Mas, llegó al fondo y sacó un centro envenenado que pudo controlar con lo justo el arquero Romel Quiñónez cuando Matos paladeaba otra conquista.
Y a los 36, tras otra buena acción por izquierda, el balón le quedó a Matos, quien quiso colocarlo junto al palo izquierdo del arco y su disparo se fue apenas desviado. En la primera mitad de la parte complementaria, Bolívar fue a buscar más el descuento y San Lorenzo lo dejó venir. No se resignó a jugar de contraataque, pero el encuentro estuvo más equilibrado. En ese contexto, Bolívar llegó por primera vez sobre los 21 minutos con un cabezazo de Ronald Eguino que se fue muy cerca del palo derecho del arco defendido por Sebastián Torrico, un espectador hasta ese instante.
Pero la zozobra fue fugaz, ya que, sobre los 25, Mercier robó una pelota en su campo, avanzó sin problemas, intentó habilitar a un compañero, pero recibió una devolución de un rival que cortó mal su pase y sacó un potente remate desde fuera del área para poner un 3-0 con aroma a final. Tres minutos más tarde, Buffarini, aprovechando una mala salida del fondo boliviano, agarró mal parado a Quiñónez y marcó el cuarto.
Y si hacía falta algo más, a dos minutos del cierre, Mas, nuevamente de cabeza, le puso cifras definitivas al marcador. Fue una gran noche para San Lorenzo, que tiene un pie y medio adentro (o algo más) en la final del certamen y está cada vez más cerca de cristalizar su sueño copero.
Los goles