El Gobierno arma la lista con los barrios del IPV que se van a frenar
El titular del Instituto Provincial de la Vivienda aseguró que se frenará la construcción de unos 80 barrios de toda la provincia y se bajará el ritmo de obra de otros. La elección de las barriadas afectadas se definirá en el transcurso de la semana. Peligran 5 de cada 10 puestos de trabajo del sector.
Sin posibilidades de tomar créditos, el gobierno de Francisco Pérez decidió hacer frente a la embestida radical con la paralización de la obra pública y ya comenzó a definir cuáles serán los barrios del Instituto Provincial de la Vivivienda (IPV) que no se realizarán por ahora y los que avanzarán a paso lento.
Por estos días, en el organismo que dirige Omar Parisi revisan cada una de las barriadas para clasificarlas en la lista no deseada de las paralizadas. Sin embargo, las definiciones surgirán luego de las reuniones que esta semana mantendrán con la Cámara Argentina de la Construcción que dirige en Mendoza Fernando Porreta; la Cámara de Empresarios de la Construcción Independiente (CECIM); la Cámara de la Construcción de San Rafael; y la Cámara de Constructores de la Federación Económica de Mendoza.
Mientras tanto, en el IPV arman una lista tentativa, que incluye a unos 80 barrios, varios de los cuales seguirán construyéndose a un ritmo menor, muchos otros se paralizarán por completo y otros tantos no iniciarán. Parisi explicó a SITIO ANDINO que no darán por ahora el listado de los barrios atentos a la crisis que puede generar en los beneficiarios de esos hogares y se limitó a decir que uno de los barrios que avanzará sí o sí será el Escorihuela, porque deben reubicarse a las 80 familias que fueron desalojadas para la construcción de viviendas del PROCREAR.
De acuerdo a los datos aportados por Parisi, las obras que directamente no se harán por el momento son las de los barrios licitados, adjudicados pero no iniciados, algunos con firma de contratos, otras ejecutadas en menos de un 50%, y unas 1.800 construcciones y 1.500 refacciones cuyo llamado a licitación se iba a lanzar casualmente este domingo, pero que fue suspendido. Mientras que se continuará a un ritmo más lento la construcción de aquellas casas con un avanza de obra superior al 50%.
En total, "son unas 3.500 las casas a construir que se verán afectadas, de unos 80 barrios de todos los departamentos", aparte de los mejoramientos, explicó el titular del IPV.
La duda surge respecto a porqué se frenan estas obras si en realidad el financiamiento es nacional y no corresponde a toma de créditos que puedan verse afectados por el fallo de la Suprema Corte, que le frenó al Gobierno la posibilidad de contar con financiamiento: "El problema es que la Nación financia el 70% de las casas y la provincia el resto", explicó Parisi y señaló que cada vivienda con urbanización tiene un costo de 380 mil pesos, y que con la decisión de la Justicia "la provincia noio puede hacer frente a los costos".
"Nosotros financiamos el resto porque se trata de casas separadas que no comparten pared, se entregan pintadas, con piso colocado, cubretanque, instalaciones eléctricas, baño completo, mesada de granito. Son casas listas para habitar. Para no poner dinero tendríamos que volver a entregarlas como antes", agregó el ex intendente de Luján de Cuyo.
Por otra parte, Parisi volvió a hacer foco en las pérdidas de empleo que generará la paralización de la obra pública. Como adelantó este medio el domingo, el funcionario señaló que "9.000 trabajadores quedarán sin empleo si no se accede al crédito". Es que el cálculo es que de cada diez empleados actuales, 5 quedarán sin trabajo. "Son muchas las familias afectadas directamente por esto, y muchos comercios y proveedores de materiales que perderían recursos", adelantó Parisi.