8 de abril de 2014 - 15:38
Ganó con el sello de Mourinho. Chelsea, que había perdido en la ida disputada en París por 3-1, terminó festejando en su casa con un tanto sobre la hora de Dembe Ba, que puso el 2-0 frente a PSG y desató la locura de Mou, quien corrió desde el banco hasta la esquina para festejar con los jugadores y, una vez más, pudo celebrar una clasificación a semifinales de la Champions League. Por el lado de los franceses, jugaron Javier Pastore y Ezequiel Lavezzi.