Suárez, quien sufría Alzheimer desde hace años y se había retirado de la escena pública en 2003, estaba internado en una clínica de Madrid desde el lunes pasado por un problema respiratorio. Su hijo, Adolfo Suárez Illana, había sido el encargado el viernes pasado de poner sobre aviso a la sociedad española al anunciar que la muerte de su padre era "inminente" debido al agravamiento de la dolencia neurodegenerativa que padecía.
Ante esto, la Presidenta no quiso estar ausente en el triste momento y le envió un escrito enviando sus condolencias. A continuación, te la mostramos.