El invierno se acerca y ya se hace sentir. Después de días cálidos y soleados, el ingreso de un frente frío que llegó con viento, lluvia y, en algunos sectores, hasta con nieve, llevaron el termómetro a temperaturas muy bajas y los mendocinos/as no sólo tuvieron que colocarse un abrigo extra sino que además encendieron las estufas. No obstante, estos artefactos pasaron varios meses apagados y es necesario tomar algunas precauciones antes de encenderlos nuevamente.
En primer lugar, es necesario resaltar la importancia del uso de artefactos de calefacción adecuados y de la ventilación permanente en los ambientes para evitar la intoxicación por Monóxido de Carbono (CO). Otra de las primeras recomendaciones es contactar a un gasista matriculado para la colocación y/o limpieza de estufas, cocinas y calefones. Vale destacar que las hornallas ni el el horno son convenientes para calefaccionar ambientes.
Desde Defensa Civil informaron que esto sucede cuando el gas (natural o de garrafa), el querosene, leña, alcohol o cualquier sustancia orgánica se quema de forma incompleta y no hay ventilación en la habitación.
Este monóxido se combina con la hemoglobina de la sangre y ya no se puede transportar oxígeno a las células provocando la deficiencia de oxígeno también en las células y tejidos del organismo. Todo esto afecta su normal funcionamiento.
¿Cómo se genera el Monóxido de Carbono (CO)?
* Insuficiente ventilación del ambiente en donde hay una combustión
* Instalación de artefactos en lugares inadecuados
* Mal estado de los conductos de evacuación de los gases de la combustión, desacoplados, deteriorados o mal instalados
* Quemador de gas con la entrada de aire primario reducida
* Acumulación de hollín u otro material en el quemador
¿Cómo puedo prevenir una intoxicación con monóxido de carbono?
Para evitar accidentes, la instalación de los artefactos debe cumplir con las condiciones de ubicación, ventilación y evacuación de gases producto de la combustión conforme a Reglamentaciones Técnicas Vigentes (NAG-200 - Disposiciones y Normas Mínimas para la ejecución de instalaciones domiciliarias de gas). Es por eso que siempre debe ser realizada y controlada por un gasista matriculado.
Antes de encender el artefacto, se recomienda hacer un service.
Tipos de intoxicación y síntomas
La absorción del monóxido de carbono y los síntomas resultantes dependen directamente de la concentración en el aire respirado, el tiempo de exposición y el grado de actividad de la persona.
El monóxido de carbono provoca dos tipos de intoxicación: la aguda, con altas concentraciones, es mortal y no produce síntomas de advertencia significativa.
Y la crónica, con los siguientes síntomas:
Sueño acumulativo
Fuertes dolores de cabeza
Náuseas, vómitos, zumbido en los oídos
Impotencia muscular y somnolencia, pudiéndose confundir con un estado gripal o mala ingesta de alimentos.
La inhalación prolongada aumenta la somnolencia provocando parálisis en los músculos del tórax, extremidades y laríngeos impidiendo pedir ayuda. Sobreviene luego el desvanecimiento y más tarde puede producirse la muerte.